Translate

lunes, 2 de mayo de 2011

1º DE MAYO, DÍA DEL FRACASO SINDICAL.

La tasa de desempleo en España alcanzó en el primer trimestre de 2011 el 21.3 %, récord para la eurozona y la mayor en el país desde 1997, con más de 4.900.000 desempleados. La provincia de Alicante sobrepasa ya los 210.000 parados y su capital los 36.000 desempleados. A todo ello hay que añadir un dato más que preocupante y cuya solución exigirá toda clase de cautelas: el 70 % de los parados alicantinos trabaja en negro, según los sindicatos http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=798814.

En medio de este desolador panorama, las tradicionales manifestaciones del 1º de mayo han sido un total y absoluto fracaso en toda España. Y Alicante no ha sido una excepción. Tomando los cálculos más optimistas de los sindicatos convocantes no ha llegado a uno de cada 20 parados los que han acudido a la manifestación sindical. http://www.diarioinformacion.com/alicante/2011/05/01/miles-alicantinos-reclaman-empleo-derechos/1122032.html

Claro que si tomamos como referencia el número de personas ocupadas el saldo es aún peor para los sindicatos. Sin duda, el 1º de mayo se ha convertido en la máxima expresión del sindicalismo español.

Aunque la situación es de extrema gravedad, lo cierto es que los sindicatos carecen de credibilidad, al igual que gran parte de la clase política, y, por tanto, de capacidad de convocatoria. No podía ser de otra forma porque estamos ante unos sindicatos que han estado más atentos a “hacer política” que a la defensa de los derechos de los trabajadores y de quienes se encuentran en el paro. Estos sindicatos han colaborado en el gran fraude electoral de 2008 ayudando a enmascarar lo que era una realidad negada por el PSOE, la existencia de la crisis. Son los mismos sindicatos que se embolsan cientos de millones de euros anuales provenientes de las arcas públicas. Los mismos que convocan una huelga general vergonzante y los que convocan manifestaciones al cobijo de la bandera de la II República, excluyendo así, de facto, a quienes no comulgan con aquel régimen. Los mismos que suscriben el argumentarlo socialista culpando de los 5.000.000 de parados a la política del Gobierno que cesó en mayo de 2004, hace ya 7 años. Paradójicamente, si se tira de hemeroteca, se puede comprobar que los mismos que abominan de aquellas políticas, las hacían propias en 2007 para atribuirse el mérito de los récords de afiliación en la Seguridad Social y, por tanto, no hicieron ni una sola reforma para sustituir el denostado modelo productivo.

Lo cierto es que negada la existencia de la crisis, reconocida después tarde y mal, despilfarrados los recursos públicos en políticas incoherentes hoy España sigue creando paro mientras que nuestros vecinos europeos no. Ellos crecen. 

D. ª Consuelo Navarro, secretaria general de CCOO en L'Alacantí-Les Marines, acaba de señalar que "la reforma más urgente, la que puede sentar las bases para un nuevo crecimiento económico que genere empleo de calidad es el cambio de modelo productivo, que debe seguir siendo una prioridad en la política de los gobiernos." Olvida que los modelos productivos no se imponen ni se crean por ley. Obedecen a reglas económicas complejas, a factores humanos, territoriales, legislativos, sociológicos y económicos dispares que no dependen de la simple voluntad política de los gobiernos. Se trata de las reglas del mercado y está demostrado que a más intervencionismo menor crecimiento y menor bienestar social.

Prioritario debería ser para los sindicatos replantearse su función, reformar sus estructuras y ordenar sus prioridades para servir de verdad y con honestidad a los legítimos derechos de los trabajadores. De lo contrario, podrán sobrevivir instalados en el pesebre del dinero público, pero seguirán cosechando fracaso tras fracaso cada día 1 de mayo.

Santiago de Munck Loyola







domingo, 1 de mayo de 2011

NO A BILDU EN LAS ELECCIONES MUNICIPALES.

Batasuna es ETA. Batasuna apoya las candidaturas de Bildu. En las candidaturas de Bildu se han situado candidatos de Batasuna, es decir, de ETA. Si Batasuna volviese a los Ayuntamientos recibiría 400.00.- € aproximadamente en concepto de subvenciones y manejaría presupuestos públicos por un importe aproximado de 225 millones de euros. Resulta incomprensible que gente que se dice demócratas apoyen la vuelta de Batasuna, a través de Bildu, a las instituciones municipales. Además de lo anterior, hay otros motivos para impedir que los batasunos infiltrados en Bildu lleguen a los Ayuntamientos. He aquí algunos motivos:






























Y quedan aún cientos de motivos más.

Santiago de Munck Loyola

sábado, 30 de abril de 2011

GRACIAS, JUAN PABLO II.


Porque cuando peor me encontraba,

cuando la desesperación se adueñó de mí,

cuando las lágrimas se me escapaban a cada instante,

cuando mi fe desaparecía por momentos,

cuando el pánico se apoderó de mis días y mis noches,

cuando el dolor no se marchaba,

cuando el futuro desapareció,

cuando todo dejó de tener sentido,

cuando me sentí abandonado,

olvidado,

oí el sonido de tu voz,

escuché tus palabras,

y el consuelo,

la paz interior

y la esperanza

renacieron y

el valor y

la fuerza

empezaron a volver,

por todo ello, Santo Padre,

gracias de corazón, muchas gracias.

Santiago de Munck Loyola




http://youtu.be/lsTo2pTgr6E


viernes, 29 de abril de 2011

SOBRE LA BODA REAL Y LA VIGENCIA DE LAS MONARQUÍAS.

Vaya semanita que nos están dando las televisiones con la dichosa boda del hijo de Lady Di. Inaguantable. Los británicos siempre han sido muy suyos con su monarquía, pero seguirles el juego de esta manera resulta ya cansino. A ver si se casa de una vez el niño y nos dejan descansar un poco.

Sin embargo, la feria mediática en torno a este enlace me ha traído a la mente algunas reflexiones que hace tiempo me rondan sobre las monarquías en nuestro tiempo. Siempre he sido partidario de la Monarquía como forma de gobierno debido, en gran parte, a la influencia familiar y al convencimiento racional de la bondad e idoneidad de la misma. Veía en la Monarquía constitucional una institución clave para la estabilidad política de las democracias occidentales que servía para desarrollar funciones de arbitraje y moderación en las pugnas de los partidos políticos y de representación del Estado. Era un hecho evidente que bajo las monarquías constitucionales europeas, a lo largo del siglo veinte, la democracia se consolidaba y las sociedades progresaban. Además, muchas monarquías estaban envueltas en un cierto halo de prestigio que la lejanía respecto a los súbditos y la ausencia de medios de comunicación como los actuales les confería respetabilidad y un cierto valor ejemplarizante para sus sociedades.

Pero hoy ya no es así. Ahora estamos al tanto de las miserias humanas que protagonizan los miembros de las Casa Reales. Los medios de comunicación, sin el temor reverencial del pasado, nos ponen al día de todo y ese halo, esa ejemplaridad ha desaparecido. Hoy, los príncipes quieren y tienen los mismos derechos que los demás ciudadanos conservando, eso sí, los privilegios ancestrales. Las Monarquías se han modernizado para que sus miembros gocen de los derechos de los plebeyos, prescindan de tradicionales obligaciones y conserven sus privilegios hereditarios. El valor simbólico y ejemplarizante de las monarquías ya no existe. La magia de las coronas ha desaparecido.

Ahora sabemos que al próximo Rey de Gran Bretaña le encantaría haberse convertido en el tampón de su amante. O que uno de sus hijos no tiene inconveniente en disfrazarse de nazi en una estupenda juerga. O que la futura Reina de Noruega tuvo un pasado más bien escabroso con escarceos con toda clase de substancias. O que el Rey de los belgas ha tenido que reconocer recientemente una paternidad extramatrimonial, algo, por cierto, más habitual de lo que parece. O que la futura Reina de España a la que traté en muchas ocasiones cuando era vecina de Rivas-Vaciamadrid ni era persona de creencias religiosas, ni monárquica.

Todo ello me plantea muchas dudas sobre la idoneidad de la monarquía en estos tiempos. Tengo muy claro que no me gustaría tener un Jefe de Estado con aspiraciones de tampón o de compresa aunque a los británicos parezca no importarles. E igual de claro tengo que con mis impuestos no me gustaría sostener a un Jefe de Estado cuya esposa no cree en la institución de la que forma parte. Si la monarquía no puede ser ejemplar, si sus miembros quieren ejercer los mismos derechos que cualquier ciudadano pero no las mismas obligaciones no veo ninguna razón de peso para sostenerla con mis impuestos y privarme de derecho a elegir a la persona que quiero que me represente como Jefe de Estado. Do ut des decían los romanos. Y si los miembros de las casas reales no están dispuestos a dar, yo tampoco.

Santiago de Munck Loyola

martes, 26 de abril de 2011

RIVAS: LA DOBLE VARA DE MEDIR O LOS 30.000 EUROS PERDIDOS.

Esta tarde, al entrar en Facebook, he visto un enlace que tenía mi amiga Elena Muñoz, candidata socialista de Rivas, sobre la sentencia del Juzgado nº 25 de Madrid por la que se condena al periodista Miguel Ángel Rodríguez, ex portavoz de primer gobierno de Aznar, a pagar una multa de 30.000.- € por llamar "nazi" en varias tertulias de televisión al ex coordinador del servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés José Luis Montes. El enlace en cuestión no tiene desperdicio http://www.escolar.net/MT/archives/2011/04/asi-hablaba-la-voz-de-aznar.html .

Pero, a lo que voy. Llamar “nazi” en unas tertulias políticas a un señor es, a juicio de este tribunal, merecedor de una condena ejemplar. Y esta sentencia se celebra con alborozo por la progresía política. ¡Faltaría más!
Pero que se le llame “nazi de mierda” o “nazi inquisidor” o que se le envíe la policía municipal  a las 5 de la madrugada a la casa de un representante del pueblo, de un concejal electo, para amedrentarlo no es objeto de reprobación alguna por parte de esta misma progresía, siempre y cuando, claro está, el “nazi de mierda” sea un representante del Partido Popular.

Nunca escuché, ni entonces, ni ahora, reprobación alguna o condena por parte de mi amiga Elena Muñoz, ni por parte de sus compañeros de Partido, ni de sus socios de gobierno. Claro que de haberlo hecho habrían estando afeando la conducta de su propia gente. A estas alturas, aquellos hechos de 2002 que ya he relatado en estas páginas ( http://santiagodemunck.blogspot.com/2011/04/rivas-asi-se-las-gasta-iu.html ), no tienen mucha importancia salvo para medir la sinceridad de las convicciones democráticas de quienes el próximo 22 de mayo concurren a las elecciones municipales. Su silencio de entonces y el de ahora ya es un buen indicador.
En todo caso, a pesar de ser entonces un modesto concejal y no un progresista benefactor de la humanidad como el Sr. Montes, si llego a saber que estos insultos se pagan así de bien me habría tomado la molestia de denunciar a sus autores y a sus cómplices y encubridores (el Gobierno Municipal de IU y PSOE con Fausto Fernández a la cabeza). Éstos no serán “nazis”, pero estalinistas de pro desde luego.

¡Lástima de 30.000.-€ que perdí entonces!
Santiago de Munck Loyola

viernes, 22 de abril de 2011

EL VERDADERO ROSTRO DE LOS NACIONALISTAS AL DESCUBIERTO EN LA COPA DEL REY.

Parece que los nacionalistas catalanes ya han institucionalizado los insultos y los abucheos al Rey y al Himno de España con ocasión de la Final de la Copa de S.M. el Rey. El boicot a los símbolos de España en las finales de fútbol a las que llega el F.C. Barcelona lleva camino de convertirse en un acto de obligado cumplimiento al que incitan y animan los nacionalistas e independentistas como el imbécil, y perdonen la expresión, de Santiago Espot, candidato de SI a la Alcaldía de Barcelona. Ser independentista catalán y llamarse Santiago tiene lo suyo para alguien cargado de tanto odio para todo lo que suene a español. En fin, cada cual con su cruz.

Hace unos años, los nacionalistas catalanes, tan sensibles e irritables ellos, pusieron el grito en el cielo porque el Alcalde de Madrid, en una plaza de su ciudad, la de Colón, instaló un gran mástil con una enorme bandera de España. Y no, no es que fuera tan grande como para que la bandera se viera desde el Tibidabo pero a los señores nacionalistas les molestaba, les parecían una “provocación”, nada menos. Hay que reconocer que estuvo provocador Álvarez del Manzano. Pero ¡hombre de Dios! Como se le ocurre colocar una bandera de España, en el centro de la capital de España. Todo el mundo sabe que eso es provocar, ofender sensibilidades tan finas como las de los nacionalistas catalanes.

Ahora toca al deporte y, en concreto, al fútbol. Esa actividad que debería servir para unir, para entretener y divertir lleva el camino de convertirse en una cita para la confrontación política, para la provocación, el insulto chabacano y para algunos nacionalistas exhiban lo peor de si mismos. Estos sujetos quieren sustituir una sana rivalidad deportiva por una rivalidad política y territorial absurda, es decir, quieren trasladar al deporte el permanente victimismo político nacionalista gracias al cual mantienen su modus vivendi y, sin el cual, serían incapaces de sobrevivir en la política y en el mercado laboral.

Tan sensibles ellos no les importa, para ello, provocar insultando y ofendiendo a los símbolos sagrados para millones de españoles. No les gusta España, pero juegan en su liga. No les gusta lo español, pero disputan la Copa del Rey. Y en ello no hay solo responsabilidad de los políticos nacionalistas, sino también de todos aquellos que al amparo de “algo más que un club” lo usan y manipulan con los mismos fines.

Dicen que el nacionalismo se cura viajando pero éstos deben estar poco “viajados” a pesar de los éxitos internacionales del Barça. Ya sabe que los encuentros en el extranjero queda poco tiempo para el turismo cultural. En todo caso, estos boicots a los símbolos españoles por parte de estos individuos sirve para conocer el verdadero rostro de los nacionalistas catalanes. Y Olé por el Real Madrid.

Santiago de Munck Loyola

jueves, 21 de abril de 2011

LAS LISTAS DEL PP: EL ESPECTÁCULO CONTINUA.


Vergüenza e indignación es lo que sienten muchos militantes del Partido Popular de Alicante ante el lamentable y ridículo espectáculo que el Partido está ofreciendo a la ciudadanía a poco más de un mes de la celebración de las elecciones municipales y autonómicas. El cierre de las listas electorales ha destapado toda clase de miserias y rivalidades dignas de un novelón venezolano. El compromiso con la democracia y el electorado, la lealtad al partido y a los militantes, la responsabilidad pública, la dignidad política y la legitimidad de las candidaturas son conceptos que han saltado por los aires. En su lugar han hecho acto de presencia las ambiciones personales, las traiciones personales y políticas y el abuso de poder.

Hasta ocho escisiones se han hecho patentes estos días ofreciendo el peor espectáculo que un partido de gobierno y con aspiraciones a renovarlo puede ofrecer. Benidorm, Torrevieja, Calpe, Villajoyosa, Villena, La Nucia, L’Alfas del Pi y Confrides son los casos más llamativos de este impresentable circo. A ello hay que añadir los retoques impuestos desde Valencia en numerosas listas electorales moviendo candidatos para favorecer así a los afines o la actitud de la alcaldesa de Alicante favoreciendo que la prensa interprete que huye de su número dos en la candidatura municipal o acaparando la cabecera de la lista municipal y la autonómica, lo que algunos interpretan como la búsqueda de un aforamiento, por si acaso. Patético.

Pero lo de Alicante no es una excepción. Junto a casos sonados como el de Álvarez Cascos hay decenas de conflictos por toda la geografía nacional. Paracas en candidaturas, colocación de amiguetes, desplazamientos injustificables de Alcaldes, etc. Y, en medio de todo esto, ¿Qué hacen los militantes del partido con más afiliados de España? Nada, lo de siempre, guardar disciplinadamente silencio y seguir trabajando por un partido y por unos ideales con una lealtad que no se merecen la inmensa mayoría de sus dirigentes.

Parece mentira pero los 700.000 afiliados del Partido Popular no tienen derecho, según los Estatutos, a elegir a sus candidatos. Y cuando la designación de los candidatos se realiza mediante un sistema siempre tutelado y antidemocrático es cuando se producen los mangoneos, las conspiraciones y, en definitiva, el poco edificante espectáculo al que estamos asistiendo. Así no se puede seguir.

Un partido que aspira a regenerar la democracia debe empezar por regenerarse a si mismo. Debe abrir sus estructuras internas a la voluntad de quienes forman parte del mismo. Tiene que terminar con estas camarillas que se perpetúan, se suceden a si mismas y se renuevan fraudulentamente para que todo siga en manos de los mismos. Los liderazgos asentados sobre mecanismos controlados y siempre tutelados no son auténticos liderazgos. Son simples jefaturas sin más carisma que el otorgado por el miedo reverencial a ser excluido de la tarta. Si los militantes populares no reaccionan y no se deciden a cambiar estos Estatutos, dentro de 4 años volveremos a ver lo mismo: el circo de las mezquinas ambiciones volverá a ofrecer nueva función.

Santiago de Munck Loyola

miércoles, 20 de abril de 2011

LA CABRA (SOCIALISTA) SIEMPRE TIRA AL MONTE.

A lo largo de la trayectoria de nuestra democracia constitucional, si hay algo que siempre ha resultado curioso, desde un punto de vista político, ha sido la actitud de los diferentes gobiernos socialistas respecto a la oposición parlamentaria. Una actitud que se ha venido plasmando de forma sistemática en los machacones y cansinos mensajes gubernamentales y del partido socialista sobre la oposición y sobre sus funciones. Parece que a los socialistas, sea en la época felipista o en la época zapateril, les incumbe, cuando están en el gobierno, no sólo calificar a la oposición, sino lo que es más preocupante, señalar qué debe hacer la oposición en cada momento y circunstancia. Es como si la determinación constitucional de las funciones de la oposición o las recogidas por la mayor parte de la doctrina política no existiesen o no importasen lo más mínimo. Para los socialistas en el gobierno la oposición debe hacer y comportarse tal y como ellos señalan y si no lo hace que se ande con cuidado. Siempre han olvidado que la oposición representa a un importante sector del electorado y que, en buena lógica, existe un compromiso electoral y programático entre la oposición y sus votantes que no puede ser adulterado para seguir las consignas y las directrices que desde el gobierno y su partido se lanzan indicando a la oposición qué debe y qué no debe hacer.

La oposición se debe a sus votantes a los que ofreció un programa y por el que fue votada. La oposición debe controlar y fiscalizar la acción del gobierno y, por último, la oposición ha de formular alternativas que deben ir construyendo el conjunto de propuestas que han de culminar en una nueva y mayor alianza con los votantes que les permita en el futuro alcanzar el Gobierno.

En los años 80 y principios de los 90 los socialistas repetían machaconamente que la oposición no tenía alternativa y que la única política posible era la suya. Daba igual que existiese un discurso alternativo, con negar su existencia parecía todo resuelto. ¡Y vaya si existía una política alternativa! Fue un hecho evidente a partir del 96.

Ahora, en la era de las conjunciones planetarias, repiten constantemente nuevas consignas que se suman a la anterior. Es verdad que desde el gobierno se sigue negando la existencia de políticas alternativas, como también se negaba hace tres años que existiese una crisis, pero a ello suman ahora la constante repetición de que la oposición no ayuda al Gobierno, que el Partido Popular “no arrima el hombro” para salir de la crisis. Es decir, que los socialistas siguen empeñados en decir qué tiene que hacer la oposición parlamentaria. Esta actitud sólo puede ser un síntoma o de que no se cree en los pilares básicos de la democracia parlamentaria, arrastrando las ancestrales tentaciones totalitarias del socialismo español, o que los ideólogos socialistas no dan más de si.

Es evidente que cuando la oposición lleva años avisando de que las decisiones económicas del gobierno son erróneas, de que las políticas del Gobierno conducen directamente al abismo y de que hay un camino distinto es, cuando menos un atrevimiento, pedir a la oposición que apoye esas desastrosas medidas. Para apoyar políticas equivocadas, teniendo bajo el brazo un programa alternativo, no está la oposición. Eso es de cajón y lo sabe cualquiera aunque lo ignore o finja ignorarlo el Sr. Pepiño Blanco. Apoyar a este gobierno en su política económica sí que es ser antipatriota.

Del mismo modo, criticar lo que hace este gobierno y poner en duda su capacidad para sacar a España de la crisis, no es, ni mucho menos, cuestionar la capacidad de España para salir adelante. Cualquiera podría pensar que la incapacidad manifiesta de los socialistas les está empujando, supongo que muy a su pesar, a envolverse con la bandera española para intentar protegerse de las críticas. Pero esa táctica típica de los nacionalistas no cuela.

Va siendo hora de que el socialismo español vaya abandonando estos instintos totalitarios y de que en lugar de decir a la oposición lo que debe hacer, aprendan, de una vez, lo que es Gobernar.

Santiago de Munck Loyola

lunes, 18 de abril de 2011

GALLARDÓN CALIENTA A DIESTRA Y A SINIESTRA.

Si hay algo que caracteriza al Alcalde de Madrid es que la mayor parte de sus intervenciones públicas no suelen pasar desapercibidas. En esta ocasión, Alberto Ruiz Gallardón ha abierto una polémica al anunciar su intención de proponer al Partido Popular que incluya en el programa electoral la creación de una Ley que faculte a los Ayuntamientos para poder retirar de la vía pública a los “mendigos”, es decir, facultar a los ayuntamientos para que puedan llevar a albergues, siempre y cuando cuenten con los medios económicos para ello, a las miles de personas que en nuestro país duermen en los parques, debajo de los puentes, en los callejones o en los cajeros automáticos, en condiciones de absoluta miseria y en medio de la general indiferencia.

Enseguida se han alzado voces críticas. De una parte, algunos compañeros de Partido que le tienen “ganas” al Alcalde de Madrid. De otra, los adversarios ideológicos del Partido Popular que se ha apresurado a lanzar sus diatribas contra el Alcalde de Madrid, contra el Partido Popular y contra todo aquello que sea sospechoso de desviacionismo de lo políticamente correcto.

«La libertad individual de los ciudadanos es lo primero para el PP», ha dicho Dª Ana Mato, vicesecretaria general de Organización, rechazando la propuesta del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón. Supongo que en los últimos años algo habrá aprendido Dª Ana, pues aún recuerdo con vergüenza ajena la ignorancia de la que hizo gala en cierta ocasión en la que debía explicar a un grupo de militantes la reforma del IRPF del gobierno de Aznar y no sabía distinguir los conceptos elementales de dicho tributo. Sus chascarrillos de rueda de prensa no valen como argumentos sólidos. Por su parte, como no, la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, discrepó: «No me gustan las prohibiciones». Supongo que la libertad individual de la mayoría de los ciudadanos también cuenta para el PP. No creo que se trate de prohibir por prohibir, pero en toda sociedad democrática hay reglas que deben obligar a todos. Uno no puede, aunque le apetezca, ir desnudo por la calle, ni acampar en un parque público, ni bañarse en la fuente de Los Luceros o en la Cibeles, ni montarse una barbacoa en la Explanada o en el Paseo de Recoletos y del mismo modo uno no puede dormir donde quiera o donde pueda. Es evidente que se trata de un tema espinoso. No todo aquel que duerme en la calle, que hace sus necesidades en cualquier sitio lo hace por las mismas razones que los demás. Hay gente que se ve en la calle porque ha perdido el piso o porque se encuentra con problemas psicológicos o porque el alcohol o las drogas han minado su personalidad o por mil razones diferentes. Pero una sociedad que se precie no puede mirar para otro lado, no puede seguir en la indiferencia. Tiene que tomar medidas porque la libertad individual no es ilimitada.

Para la ministra de Sanidad, Leire Pajín, el movimiento de Ruiz Gallardón es «populista y estético», y critica al consistorio madrileño por no incrementar las «medidas inclusivas» para los mendigos. Los datos cantan, aunque la insigne ministra no los conozca: desde que su partido gobierna el número de españoles bajo el umbral de la pobreza ha crecido sin parar, al igual que el número de los sin techo hasta el punto de que los albergues municipales no dan abasto, como tampoco lo dan los comedores de Caritas. No es una cuestión de estética, ni de populismo (sabrá ella lo que es populismo) es una cuestión de solidaridad. Claro que, puestos a terciar en la polémica, no han podido faltar los osados ignorantes de izquierdas que se han apresurado a comparar la propuesta con la “franquista” la ley de vagos y maleantes, cuando lo cierto, como ya ha recordado por el propio Gallardón, es que dicha ley fue aprobada en agosto de 1933 por un gobierno con participación socialista. Y para qué mencionar las declaraciones del procastrista Llamazares que acusa al regidor madrileño de no ir contra las causas que provocan la mendicidad.

Podrá ser o no oportuna la medida propuesta por Gallardón, pero nadie puede negar de que se trata de una propuesta valiente que intenta abordar un problema real, de muy complejas causas y en el que no cabe una solución simple. El debate está abierto y algo hay que hacer. Lo que es indudable es que los Ayuntamientos tienen la obligación moral y política de atender a los más necesitados y que para ello necesitan muchos más recursos que el Estado les niega, como también es indudable, al menos para mi, que no todo se puede hacer, que no todo puede estar permitido o tolerado en una sociedad en la que la convivencia debe ser preservada.

Santiago de Munck Loyola

domingo, 17 de abril de 2011

RIVAS: ASÍ SE LAS GASTA IU.


Rivas-Vaciamadrid. 20 de junio de 2002. 5 de la madrugada. Suena insistentemente el timbre de la casa. Mi mujer y yo nos despertamos. ¡Qué raro! ¿Quién podrá ser a estas horas? Me levanto seguido por mi mujer y me asomo por una de las ventanas que da a la plaza. Abajo, junto a la puerta, un coche de la Policía Municipal con las luces de emergencia encendidas. Dos policías, en la puerta del jardín tocando el timbre. Nos asustamos, mi mujer presa de los nervios, dice: “los chicos, seguro que le ha pasado algo a alguno de los chicos”. Bajamos deprisa las escaleras, en pijama, temiendo lo peor, salgo al jardín mientras Toñi permanece tras los cristales de la ventana de la cocina, nerviosa, expectante. Llego a la puerta, la abro, saludo y pregunto qué pasa. Tras saludarme los policías municipales me dicen que “han aparecido” pintadas desagradables contra mi en la fachada del Ayuntamiento y que vienen a aconsejarme que por mi seguridad no vaya a trabajar dentro de unas horas, día de la huelga general. Respiro aliviado y les digo que gracias por el aviso pero que iré a trabajar, que no entra en mis planes hacer huelga. Se marchan y entro en casa para tranquilizar a mi mujer. Nuestros hijos están bien. Y le cuento el motivo de la intempestiva visita.

Poco después de las ocho llego al aparcamiento del Ayuntamiento. Está prácticamente vacío, sólo hay un vehículo de la Policía local. Un piquete “informativo” de más de 50 sujetos me ve meter el coche y se encaminan hacia la valla del aparcamiento con actitud agresiva, enarbolando banderas y palos. Me insultan y amenazan. ¿Quién encabeza el piquete? El concejal de seguridad ciudadana, de IU. El mismo que manda a la Policía Local. El responsable de la seguridad del edificio cuyas cámaras de vigilancia se han “estropeado” misteriosamente justo cuando alguien realizaba pintadas amenazantes e insultantes contra mí, el Portavoz de la Oposición Municipal, y justo cuando alguien estropeaba las cerraduras del edificio con silicona. El mismo concejal que participa en el piquete que tras este incidente se marcha por el Polígono Industrial obligando a cerrar a las empresas que habían abierto y rompiendo las lunas de las que se resistían a hacerlo.

Así se las gastaba IU de Rivas-Vaciamadrid y así se las sigue gastando. Demócratas de toda la vida. Decía Winston Churchill que "La democracia es el sistema político en el cual, cuando alguien llama a la puerta de calle a la seis de la mañana, se sabe que es el lechero” a lo que habría que añadir que en Rivas-Vaciamadrid, con IU, no.

Santiago de Munck Loyola

martes, 12 de abril de 2011

RIVAS: IU VENDE HUMO, PERDÓN, VAPOR.

La proximidad de unas elecciones municipales puede impulsar a los candidatos, en muchas ocasiones, a realizar inauguraciones precipitadas (aeropuertos sin aviones, por ejemplo) o a presentar proyectos exagerando considerablemente las posibles bondades de los mismos. A veces, incluso se dicen cosas que poco tienen que ver la realidad. No es que los candidatos quieran mentir o engañar a los ciudadanos, pero seguramente la pasión del momento les empuja hacia los límites de la fantasía, confundiendo sus sueños con la realidad.

Algo así ha ocurrido en Rivas-Vaciamadrid con el anuncio de su Alcalde, el Sr. Masa, del nuevo sistema en experimentación para el tratamiento de los residuos sólidos urbanos.

Hay que empezar por señalar que la secuencia de los hechos es ya, de por sí, un poco extraña. Primero, en los foros de Internet algunos vecinos empiezan a mostrar su inquietud por la puesta en marcha de los que algunos piensan que es una mini incineradora. Se abre el debate en la red y se dan explicaciones contrarias por parte de los internautas próximos a IU. A continuación, el candidato socialista a la Alcaldía, Sr. Magadán, socio de gobierno de IU, sale a la palestra para señalar que su formación política no apoya esa iniciativa o, al menos, el convenio entre el Ayuntamiento y la empresa DO2. Resulta, cuando menos extraño, que se estén realizando ya pruebas sin el conocimiento y el consentimiento del PSOE, pero, en fin… Finalmente el 31 de marzo, comparece en rueda de prensa el Alcalde para explicar que se trata de un proyecto para implantar un nuevo sistema de tratamiento de residuos sólidos urbanos en el que el Ayuntamiento participa colaborando con la empresa Ecohispánica, que es la que posee la patente de este sistema revolucionario de tratamiento de la basura, cediendo una nave en la que desde una semana antes se han iniciado las pruebas finales. A todo esto, parece que la opinión de la oposición sobre este asunto ni existe, ni se espera.

El caso es que el Sr. Masa, quizás embriagado por el entusiasmo, dice: “Después de casi dos décadas de lucha en la calle contra Valdemingómez vamos a conseguir ‘cerrar’ este tipo de instalaciones contaminantes gracias a la ciencia”. Será de “lucha” con ciertos paréntesis ¿no? (Ver al respecto http://santiagodemunck.blogspot.com/2010/07/la-incineradora-y-la-hipocresia-de-iu.html ) Llevado también por su entusiasmo habla de sistema revolucionario cuando lo cierto es que este sistema, que no es exclusivo de esta empresa diga lo que diga el Sr. Masa, lleva varios años en el mercado y puede comprarse una central de tratamiento a la carta según el volumen del municipio. Y, en el colmo, de las afirmaciones gratuitas e insolventes se atreve a proclamar que se trata de un sistema que va a permitir tratar la basura con vapor de agua sin emitir olores ni CO2 a la atmósfera. Hay que ser serios, por favor. Hay que tratar a los ciudadanos con un poco más de respeto, aunque haya elecciones de por medio. En este sistema, cuyos resultados finales parecen satisfactorios, los residuos se someten a un baño de vapor de agua saturado a una temperatura que puede oscilar entre los 120º C y los 190º C, dependiendo de la composición del residuo, y bajo una presión que puede alcanzar en según que casos hasta los 8 ó 9 bar, durante 40 minutos. Para alcanzar esas temperaturas y esas presiones hace falta muchísima energía, energía que ni por aproximación puede producirse con el tratamiento posterior de los residuos y que, por tanto, ha de ser suministrada por los procedimientos tradicionales. Es decir, produciendo CO2. Tan sencillo como eso. De ahí la causa por la que este sistema que mejora mucho el tratamiento de los residuos urbanos no se generaliza. Es muy caro y contaminante.

Y no es que lo diga un servidor que no es entendido en la materia, sino que los dicen los propios expertos en este campo y el mismo mercado. Mucho me temo que, hoy por hoy, este sistema no va servir para cerrar incineradora alguna, aunque eso sí, al Sr. Masa le ha venido muy bien para sacarse un conejo de la chistera electoral.

Santiago de Munck Loyola

lunes, 11 de abril de 2011

LAS LISTAS DEL PP, UN ESPECTÁCULO.

Ni la Comunidad, ni Alicante, ni los votantes, ni los militantes del PP se merecen el espectáculo organizado en torno al proceso de elaboración y proclamación de las listas del Partido Popular tanto para las autonómicas, como para las elecciones locales.

Un proceso largo y tedioso plagado de enfrentamientos, traiciones y conspiraciones que ha concluido con la aprobación de unas candidaturas que no han terminado de satisfacer, por lo visto, a ninguna de las partes enfrentadas en este procedimiento (http://www.diarioinformacion.com/alicante/2011/04/09/cien-candidatos-pp-alicantino-cercanos-ripoll-indignados-lista-autonomica/1114686.html ) y que está dando que hablar, y mucho, a los rivales del PP.

Sin entrar en la apreciación que pueda merecer la presencia de imputados en diferentes procedimientos judiciales en estas listas, pues es evidente la utilización sectaria y partidista que de la justicia y de los medios policiales se viene haciendo desde hace tiempo, lo cierto es que sirve para “echar carnaza” a los adversarios políticos, siempre dispuestos a acabar con la presunción de inocencia cuando no se trata de los propios conmilitones.

Hay un hecho indiscutible que afecta a todas estas listas recientemente aprobadas y que podrán satisfacer más o menos a unos y a otros: que estas listas se han hecho de espaldas de los militantes de Partido Popular. Y ello es así en virtud del procedimiento establecido en los Estatutos del propio Partido y que al final determina que los dirigentes de Madrid, miembros del Comité Electoral Nacional, saben mucho mejor qué candidatos convienen a los alicantinos, por ejemplo, que los propios afiliados del Partido Popular de Alicante. A los afiliados del partido Popular ni se les consulta ni se les deja opinar internamente sobre sus preferencias para la designación de los candidatos a la Alcaldía de la ciudad o a los escaños de las Cortes Valencianas. Es un hecho evidente e incontestable, como lo es también el hecho de que, pudiendo hacerlo, ningún candidato a la Alcaldía de las grandes ciudades tiene el valor de someterse a una asamblea informativa del Partido para medir el apoyo con que cuentan entre la militancia. Los militantes del Partido Popular solo cuentan para pagar la cuota de afiliación, para que los llamen para llenar las sillas de los actos electorales y para esperar ahora a que les llamen para hacer de apoderados e interventores el día 22 de mayo.

Otro hecho que denotan estas listas recientemente aprobadas es la pretensión de acumular puestos institucionales por parte de algunos candidatos. Los estatutos del PP regulan determinadas incompatibilidades para que esto no ocurra. Pero, hecha la norma, hecha la trampa: hay excepciones. Y, acogiéndose a la excepción generalizándola, hay quienes son candidatos a la Alcaldía de su ciudad, como en Alicante y Valencia, y al mismo tiempo candidatos a ser diputados por la Provincia en las Cortes. Seamos serios por favor ¿dirigir una ciudad como Alicante no exige una dedicación al cien por cien? Y ¿representar a la Provincia en las Cortes no exige también una dedicación permanente? Supongo que la respuesta a ambas preguntas sólo puede ser afirmativa. Entonces ¿cómo se puede hacer compatible ser Alcaldesa, por poner un ejemplo, de Alicante y al mismo tiempo diputada en las Cortes? ¿En cuál de los dos cargos no va a haber una dedicación al cien por cien? Que nos lo digan, porque los electores tenemos derecho a saberlo.

Los que hoy se sienten defraudados o indignados por esta forma de hacer las cosas deberían tomar buena nota de ello y actuar en consecuencia cuando llegue la hora de elegir a los dirigentes del partido en su localidad o cuando llegue la hora de apoyar, en el próximo Congreso, las enmiendas destinadas a devolver la palabra y el poder a los afiliados del Partido Popular y a reforzar el sistema de incompatibilidades para acabar con estos abusos.

Santiago de Munck Loyola