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lunes, 26 de enero de 2015

¿PP vs PODEMOS?

Es tal la cantidad de mensajes y noticias que se ponen en circulación a diario que es preciso ponerlas entre paréntesis, hacer un alto y analizarlas con detenimiento para poder tener una visión más sosegada y objetiva de la realidad. Vivimos tiempos de cambios y los cambios siempre asustan  a quienes ven peligrar sus intereses y radicalizan muchos planteamientos. Este fin de semana, nos han “bombardeado” con la Convención del Partido Popular, con las constantes apariciones de Pablo Iglesias y “Podemos” y con las elecciones griegas. En los tres casos, el miedo, la radicalización y el caos son ideas que pueden reconocerse fácilmente en los mensajes que nos trasladan a los ciudadanos. Hay quienes parecen empeñados en convertir la política en algo muy alejado del debate y del contraste racional de ideas, del diálogo; algo muy alejado de esa noble actividad humana en la que la Libertad del individuo responsable y racional encuentra su máxima expresión y la reducen a una vulgar competición en la que la simplificación de las ideas llega al absurdo y en la que el temor a lo desconocido busca la adhesión y, en definitiva, el voto.

De un lado y de otro tratan de levantar el miedo, intentan plantearnos disyuntivas excluyentes que, en el fondo, encierran un profundo desprecio a la inteligencia de la gente y destilan un tufo totalitario. “No hay políticas alternativas a la nuestra”, “sólo nosotros vamos a frenar a los populismos” o “nosotros o el caos” nos gritan desde las filas del Partido Popular. Y desde las antípodas populistas proclaman que “el PP o PODEMOS” en un mensaje perfectamente coincidente. Tratan de hacernos creer que no hay más que dos opciones políticas: el PP o PODEMOS. Y los dos discursos se cimentan en el miedo y en el odio. Quieren convertir la política y las elecciones en un plebiscito, en un referéndum en el que las posibilidades de elegir se reduzcan a dos opciones y nada hay más peligroso para la convivencia democrática que la radicalización del voto, el “o conmigo o contra mi”.


El voto político, en el fondo, no es otra cosa que un contrato basado, como todos los contratos, en la existencia de la confianza, un contrato entre el elector y el candidato. Si el camino que algunos elijen para demandar el voto del ciudadano se sustenta, no en la confianza, sino en el miedo y si, además, para conseguirlo se apoya en la mentira lo único que se logra es pervertir y corromper la esencia de la democracia, la confianza entre el votante y el candidato. No está de más recordar que un contrato suscrito mediante la falsedad o bajo la coacción es un contrato nulo.

Es falso que la competencia política se reduzca a solo dos opciones y lo saben quienes así lo proclaman. Y es francamente despreciable que se busque el voto, la adhesión ciudadana apelando al miedo que es el peor enemigo de la memoria, de la inteligencia y de los sentimientos más elevados. Hay que combatir las falacias que unos y otros tratan de vendernos. Hay que desterrar la resignación que tanto beneficia a quienes aspiran a mantener sus privilegios y a quienes enarbolan la bandera de la utopía sin ofrecer una sola propuesta viable. En definitiva, hay que recuperar para la política la ética que entre tanto oportunista ha desaparecido de la práctica diaria.

Los ciudadanos podemos y queremos elegir en absoluta libertad y los que la condicionan o amenazan con sus mensajes y discursos simplistas y excluyentes no son dignos de recibir adhesión alguna. Los ciudadanos podemos y queremos transformar la realidad a través de la política y no debemos permitir que nos sigan alejando de ella. La pluralidad, la diversidad, los matices, las diferentes perspectivas enriquecen y permiten el ejercicio de la libertad de elección con más plenitud. En nuestras manos está cambiar todo aquello que no nos gusta, todo aquello que entorpece nuestro desarrollo personal y colectivo. Todo depende de nuestra propia responsabilidad.

Vivimos en una gran provincia, Alicante, que no ha sido tratada con justicia durante décadas. No pueden decirnos ahora los responsables de su estado de postración que no hay alternativa. Y tampoco pueden decirnos quienes solo saben promover el “los de abajo contra los de arriba” que ellos son la única salida. Hay otra forma de entender la política, de protagonizarla por parte del ciudadano, de defender nuestra provincia, de proponer soluciones sin renunciar a los principios y a los valores. Esperanza Ciudadana es la opción del cambio, la alternativa al miedo, a la resignación y al odio. Esperanza Ciudadana representa más sociedad y menos impuestos, más libertad y menos intervencionismo, más solidaridad y menos recortes, más eficacia y menos despilfarro, más Alicante y más España. Nos importa la persona y sus problemas. Creemos en su capacidad para afrontar la vida. Y entendemos la  política como un simple instrumento al servicio del progreso individual y colectivo. Creemos firmemente en las inmensas capacidades y en el enorme potencial de Alicante y sabemos que sin su defensa permanente ni unos ni otros serán capaces de sacarnos adelante. Es hora de pasar página y de apostar por el cambio.

Santiago de Munck Loyola

viernes, 2 de enero de 2015

Esperanza Ciudadana, sin complejos.


Dicen que una de las claves del éxito de Podemos es haber cambiado de “eje” de posicionamiento político. Para el líder de esta formación, el juego izquierda-derecha forma parte de la vieja política: "La política entre izquierda y derecha es una estafa". Pretende hacer creer que el debate político no se mueve en la dialéctica izquierda-derecha, sino en la de los de abajo contra los de arriba, en la de ciudadanía contra oligarquía o en la del pueblo contra la casta. Dice, tratando de eludir un posicionamiento en la línea izquierda-derecha, que  “el problema de este país no es la izquierda y la derecha. El problema de este país es que hay una minoría de privilegiados, una oligarquía de sinvergüenzas que está robando a la mayoría”. Lo cierto de este planteamiento es que supone un retorno al concepto marxista más primario de la lucha de clases, los de abajo contra los de arriba, y que puestos a establecer la dialéctica política en un eje vertical elude señalar los diferentes niveles o estratos que en la realidad existen. Dos clases sociales en pugna, la casta contra la no casta, es una interesada simplificación que evita abordar dos problemas de fondo reales: la existencia de un sistema político degenerado que fagocita todo y la confrontación de principios y de valores de vida diferentes que existen y son una realidad cierta.

Es cierto que existen diferentes ejes de posicionamiento político, izquierda-derecha, centro-periferia, religión-secularización,… pero es el primero el que más usamos los ciudadanos quienes examinamos, con más o menos profundidad,  cualquier fenómeno político o electoral y lo etiquetamos. También es cierto que el etiquetado, derecha, centro o izquierda, responde más a prejuicios personales que a criterios realmente objetivos y que en no pocas ocasiones la percepción ciudadana, en la que influye mucho la creada por los medios de comunicación, sobre la ubicación de una determinada fuerza política no se corresponde con los objetivos o la propia ubicación de sus promotores. Vox es un buen ejemplo de ello. Es finalmente la mayoría de la opinión pública la que ubica en el eje derecha-izquierda a un partido político y no suele hacerlo en virtud del Ideario del mismo, sino de sus posicionamientos diarios frente a los problemas políticos, económicos y sociales existentes. Un partido político no es lo que dice ser, no está donde dice estar sino que es lo que la mayoría social percibe y está donde esa misma mayoría le ubica. La coincidencia entre una y otra parte exige enormes dosis de coherencia y de credibilidad, difíciles de encontrar en el espectro político español.

Y en estas lides estamos, como no podía ser de otra forma tratándose de un partido nuevo, en Esperanza Ciudadana. Nos preguntan ¿sois de centro? ¿de centro-derecha? ¿de derechas? Y en el fondo da igual donde pretendamos situar al partido los promotores del mismo porque al final será la gente quien nos sitúe en un lugar u otro del eje derecha-izquierda. Es más, tal y como está el sistema político, resulta difícil pretender desarrollar políticas de derechas o de izquierdas si antes no se procede a reparar el propio sistema, a regenerarlo porque está tan corrompido que, sin su limpieza previa, termina por asimilar a cualquiera que pretenda desarrollar un programa concreto. Y ése es el primer objetivo de un partido joven como Esperanza Ciudadana: limpiar un sistema parasitario como el existente que termina por convertir en “casta” a cualquiera que se incorpore al mismo sin tener claro que es el propio sistema el que impide ir hacia la derecha o a hacia la izquierda. Es algo tan sencillo y a la vez tan complicado como volver a los fundamentos de la democracia, como devolver la política al ciudadano. Y el segundo gran objetivo de Esperanza Ciudadana es reivindicar para la Provincia de Alicante el peso político y presupuestario que le corresponde, acabar con la permanente discriminación que viene sufriendo gobierne quien gobierne en Valencia o en Madrid.

Esperanza Ciudadana tiene, y eso es inevitable, un Ideario concreto, y en consecuencia defiende unos principios y valores que cada cual podrá etiquetar como quiera. Cuando Esperanza Ciudadana enarbola la defensa de las libertades y derechos individuales y colectivos, de la familia como fundamento de la sociedad, de la soberanía nacional y de la unidad de España o promueve la reforma profunda de la organización territorial del estado o la defensa de la Provincia de Alicante frente a las políticas discriminatorias de la Generalidad Valenciana y del Estado habrá quien la etiquete como partido de derechas. Y cuando Esperanza Ciudadana propugna la eliminación de toda clase de privilegios de la clase política, la absoluta ejemplaridad y austeridad de los servidores públicos, el fin de los desahucios de los domicilios familiares, la dación en pago, la recuperación de las prestaciones sociales recortadas, la persecución implacable de la corrupción o la participación ciudadana en la toma de decisiones más allá de las citas electorales habrá quien le arranque esa etiqueta.

En Esperanza Ciudadana estamos confluyendo ciudadanos con distinta procedencia ideológica y con distintas sensibilidades, liberales, conservadores, socialcristianos, pero que compartimos no sólo nuestro desencanto y nuestro hartazgo tanto de partidos como de políticas del y para el sistema, sino también un profundo deseo de cambio. Compartimos el amor por nuestra Patria, por nuestra tierra y por ello queremos que la política sea un instrumento de transformación de la realidad al servicio del ciudadano, de las personas y no al servicio de los grupos de intereses que controlan partidos, sindicatos o medios de comunicación. Según la clasificación corriente un partido con una profunda vocación transformadora y con un fuerte compromiso social no sería un partido de derechas. Pero es evidente que, utilizando el eje tradicional derecha-izquierda, el Partido Esperanza Ciudadana no es un partido de izquierdas, que es un partido de derechas por los valores que lo inspiran y que su ubicación exacta en ese segmento será consecuencia de su discurso concreto ante cada problema concreto.

Nuestra prioridad como partido es ofrecer respuestas, nuestras propuestas, a los problemas que nos aquejan a los ciudadanos. Y hacerlo con claridad, sin medias tintas, hablando claro y sin complejos y así lo vamos a hacer. Los retos que tiene planteados nuestra sociedad, nuestra Provincia exigen propuestas y decisiones claras. Somos conscientes de que será muy difícil hacerse oír, pero no por ello vamos a desistir. En la medida que las propuestas y soluciones a los problemas concretos y los programas de Esperanza Ciudadana lleguen a los ciudadanos será posible entonces etiquetar a este nuevo partido con más o menos acierto, pero no es esa nuestra preocupación. 

Nuestro objetivo es consolidar una alternativa de cambio profundo, pragmática, realista y alejada de cuentos populistas trasnochados. El antiguo proverbio chino, recordado en su día por Felipe González, está hoy vigente más que nunca: “Da igual el color del gato, lo importante es que cace ratones”. Hoy, además de ratones han proliferado las ratas y Esperanza Ciudadana quiere y puede cazarlas.


Santiago de Munck Loyola
http://santiagodemunck.blogspot.com.es



miércoles, 24 de diciembre de 2014

COMUNICADO ANTE LA DIMISIÓN DE LA ALCALDESA DE ALICANTE.

23-12-2014
COMUNICADO ANTE LA DIMISIÓN DE LA ALCALDESA DE ALICANTE.

La dimisión anunciada hoy de la Alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, constituye una buena noticia para todos los alicantinos y, especialmente, para los que desde hace años han tenido el valor de denunciar sus inaceptables prácticas de gobierno, avaladas por el PP de Alicante, en medio de un generalizado silencio de gran parte del tejido social e informativo alicantino. Se trata de una dimisión forzada e incompleta y únicamente destinada a intentar lavar la cara del PP alicantino, porque una regeneración democrática auténtica exige la dimisión de quienes la han apoyado, tutelado y protegido desde el Partido Popular de Alicante y, en especial, del Secretario General provincial, José Juan Zaplana, y del Presidente Provincial, José Ciscar.

Esperanza Ciudadana lamenta que esta dimisión tardía se haya realizado a través de una red social ignorando y despreciando así al conjunto de los ciudadanos de Alicante.

Con la dimisión de Sonia Castedo no se cierra una etapa política, sino personal, pues sus políticas, que tanto daño han hecho a la buena imagen y al prestigio del Ayuntamiento de Alicante, son las del Partido Popular y las de sus concejales cómplices y cooperadores políticos y estas políticas tienen su continuidad no sólo en la permanencia de los mismos, sino también en la ejecución del presupuesto de la ciudad recientemente aprobado y al servicio exclusivo de los intereses de los “amigos” y financiadores de las campañas electorales ilegales del Partido Popular.

Ante esta situación, Esperanza Ciudadana, partido alicantinista y regeneracionista, va a seguir construyendo una alternativa centrada, moderna y profundamente democrática, para ofrecer a los alicantinos un proyecto político al servicio del conjunto de los ciudadanos, al servicio de los intereses generales, de nuestra provincia y de nuestra ciudad.



lunes, 15 de diciembre de 2014

Carta a los ciudadanos belgas de la Provincia de Alicante.

Lieve buren,

Volgend jaar, in de maand mei, zullen de gemeentelijke en regionale verkiezingen in Spanje plaats hebben. De communautaire burgers die in Spanje verblijven hebben recht aan deze verkiezingen deel te nemen. Om als kiezer of kandidaat deel te nemen is er een noodzakelijke conditie: in de huidige verkiesingstelling, voor 30 december 2014 ingeschreven te zijn. Om het inschrijven in de verkiesingstelling van burgers van communautaire landen, verblijvend in Spanje, moet men een formele verklaring afleggen dat men volontair het recht op de gemeentelijke verkiezingen  in Spanje uitoefent. Men mag zich aanmelden in elke gemeentehuizen, op elk moment, voor 30 december 2014.

“Esperanza Ciudadana” is een nieuwe politieke partij van de provincie Alicante, ontstaan om provinciale belangen te verdedigen en om de politieke korruptie te bestrijden. Wij adresseren U, als belgisch burger verblijvend in de provincie Alicante, om U de belangrijkheid van deze verkiezingen in herinnering te brengen en daar aan deel te nemen om ofwel onze politiek projekt te steunen ofwel van onze partij in uw gemeente deel te maken.

We zijn ter uwe beschikking om U alle noodzakele informatie te bezorgen.

Santiago de Munck

Voorzitter    

Estimé voisin:            
          
L’année prochaine, au mois de mai, des élections municipales et régionales seront célébrées en Espagne. Les citoyens communautaires résidants en Espagne ont le droit de participer aux dites élections. Pour pouvoir participer comme votant ou comme candidat est condition indispensable être inscrite dans lerecensement électoral en vigueur pour ces élections avant le 30 décembre 2014. Pour l'inscription dans le recensement électoraldes citoyens de pays communautaires résidants en Espagne il fault complimenter une déclaration formelle manifestant la volonté d'exercer le droit de suffrage en Espagne dans les élections municipales. La manifestation peut se présenter dans les Mairies de chaque commune à tout moment avant le 30 décembre 2014.
          
“Esperanza Ciudadana” est un nouveau Parti politique de la Province d'Alicante né pour défendre les intérêts provinciaux et pour combattre la corruption politique et nous nous dirigeons à vous, comme citoyen belge résidant à la Province d'Alicante, pour lui rappeler l'importance de ces élections et pour l'encourager à participer dans les mêmes, bien en appuyant notre projet politique, bien en formant partie du même dans sa commune. Nous sommes à sa disposition pour lui offrir toute l'information nécessaire.       
 
Santiago de Munck      
Presidente

domingo, 30 de noviembre de 2014

Esperanza Ciudadana.


Ante las injusticias, la corrupción y ante todo aquello de la vida política que no nos gusta podemos resignarnos o dar un paso al frente y decidir implicarnos para cambiar las cosas. Hoy, afortunadamente, los ciudadanos podemos cambiar las cosas. El poder está ahí y es nuestro, pero tenemos que saber utilizarlo. Para transformar nuestra sociedad, para mejorar nuestro pueblo o nuestra ciudad no debemos seguir esperando cómodamente a que alguien venga a hacerlo, a que alguien nos ofrezca soluciones mágicas. Somos nosotros mismos los que podemos y debemos intentar elaborar las recetas necesarias, porque somos nosotros los que mejor conocemos los ingredientes que hay en nuestro entorno, en nuestra vida diaria. Nos han engañado, nos han traicionado y nos han vendido no se sabe muy bien por qué, porque aquí nadie da la cara y nadie explica nada.

No somos pocos los ciudadanos de Alicante que desde hace tiempo nos venimos sintiendo políticamente huérfanos ante tanta promesa incumplida, ante el triste y corrupto panorama político diario y ante las negras perspectivas que, como consecuencia de lo anterior, las encuestas anuncian. En una situación como ésta hay varias posibilidades de actuación. Uno puede conformarse con lamentarse y  criticar la situación en las redes sociales, en el bar o con los amigos y en las próximas elecciones municipales, que están a la vuelta de la esquina, abstenerse o taparse la nariz y volver a votar al candidato que, una vez más, vuelva a imponer la dirección provincial del PP, con tal de impedir el triunfo de cualquier aventura populista. Una segunda posibilidad es optar por alguno de los partidos regeneracionistas minoritarios, aunque son prácticamente inexistentes en el campo del centro derecha. Y otra opción, mucho más comprometida y difícil es dar un paso más y colaborar activamente en la construcción de un proyecto político nuevo y diferente con el que sentirse identificado y trabajar por su triunfo electoral.

La inexistencia de un partido de centro derecha con una auténtica vocación regeneradora y que defienda los intereses de nuestra provincia y de sus municipios es la razón que nos ha impulsado a un grupo de ciudadanos a fundar Esperanza Ciudadana. La regeneración política en su más amplio significado y la Provincia de Alicante son las notas que diferencian a este nuevo proyecto político de todos los demás. Nos hemos unido personas que compartimos muchos principios y valores, personas que se definen como liberales, centristas o conservadoras, que amamos a España y que, por ello, entendemos que hace falta un Alicante fuerte y políticas nacidas en las calles de los municipios alicantinos. No queremos que desde Madrid, Barcelona o Valencia nos digan quiénes tienen que representarnos. No necesitamos que desde Valencia, Barcelona o Madrid nos dicten los programas o las políticas que Alicante necesita porque llevan décadas haciéndolo y los resultados están a la vista, peores imposible. Nos hemos unido y estamos construyendo un proyecto político alicantino porque queremos que desde las calles de Denia, de Orihuela, de Alcoy, de Villena o de Alicante se decida quién ha de representarnos y se diga a Valencia y a Madrid qué necesitan nuestros municipios y qué exigimos para nuestra Provincia. Nos hemos unido porque queremos construir un proyecto político distinto, en el que el afiliado y el simpatizante tengan siempre voz y voto, en el que la participación y la transparencia sean constantes y en el que la conexión con la sociedad sea permanente. Un proyecto que se ocupe en primer lugar de buscar soluciones a los problemas inmediatos: paro, desahucios, derecho a la vivienda, pobreza, alimentación infantil, dependencia, libertades públicas, etc.

Los ciudadanos podemos, si queremos, cambiar las cosas. Y dentro de seis meses podremos intentarlo con el voto si somos capaces de presentar propuestas regeneradoras, programas creíbles y candidatos solventes. Esperanza Ciudadana está en ello. Esperanza Ciudadana es ya una realidad, pero también es un proyecto de cambio; un proyecto porque se está construyendo con el concurso y ayuda de ciudadanos comprometidos con la sociedad e ilusionados con el objetivo de legar un futuro mejor para sus hijos. Pero la consolidación y el éxito de una empresa como ésta dependen de la ayuda y del compromiso de mucha más gente, de la gente que ya nos conoce y nos sigue en las redes sociales y de la gente que aún no sabe de nuestra existencia.

No es tarea fácil. No tenemos prácticamente acceso a los medios de comunicación. No contamos financiación pública ni la queremos. Dispondremos de lo que los ciudadanos quieran, de lo que la gente aporte. En definitiva Esperanza Ciudadana llegará hasta donde los vecinos quieran que llegue. No, no es tarea fácil y los obstáculos son muchos pero defender a nuestra Provincia y trabajar por una sociedad mejor y más limpia merece la pena de verdad. Tú puedes hacerlo, no te resignes y ¡actúa!

Santiago de Munck Loyola


jueves, 2 de octubre de 2014

Nace un nuevo partido de y para la Provincia de Alicante: Esperanza Ciudadana.

COMUNICADO.
1-10-2014.
En el día de ayer se constituyó una nueva formación política “Esperanza Ciudadana”con el objetivo de ofrecer a los ciudadanos de la Provincia de Alicante un proyecto político basado en la defensa de los intereses de la Provincia y en la regeneración democrática de las instituciones.
Ante la ausencia de un proyecto político capaz de hacer frente a los numerosos retos que el reconocimiento y el progreso de Alicante plantea y de combatir de forma decidida la degeneración política actual, nace Esperanza Ciudadana y lo hace como un partido político de carácter provincial, alicantinista y regenerador de la vida pública que va a basar su actuación en el desarrollo de los siguientes ejes:
1º Promover el protagonismo de los ciudadanos de Alicante para reformar,  transformar y remover los obstáculos que impiden el desarrollo de una sociedad más democrática, más justa y más honrada.
2º Impulsar la participación política y social de los ciudadanos que creen en la persona como el centro, protagonista y destinatario de la acción política y social, en la familia como eje vertebrador de la sociedad, en la libertad real y la igualdad de los españoles en todos los niveles, en la igualdad de oportunidades, en la dignidad de la persona, en la democracia como expresión de la soberanía del pueblo español, en el diálogo y la tolerancia.
3º Promover la regeneración democrática impulsando medidas que favorezcan la ejemplaridad, la transparencia, la eficacia, la igualdad, la participación ciudadana y la concepción de la dedicación política como expresión temporal de una vocación de servicio al ciudadano.
4º Defender los intereses de la Provincia de Alicante ante la administración autonómica y estatal, reivindicando el protagonismo económico, social y político que por su peso y capacidad le corresponde.
Los promotores de Esperanza Ciudadana han manifestado la voluntad de esta formación de concurrir a las próximas elecciones locales y autonómicas.