Hay que ver la manía o costumbre que tienen algunos de adjudicar a los
demás intenciones o fines que los interesados nunca han manifestado. La
imaginación es libre y soñar también, pero de ahí a convertir las ensoñaciones
en noticia hay un gran abismo. Una vez más, el pasado 15 de marzo, el diario
ABC publicó una noticia, bajo el titular “Los
críticos del PP de Alicante se alían con el exalcalde de Alcoy”, que poco
se compadece con la realidad. La información empieza como sigue: Santiago de Munck, militante del PP
alicantino e impulsor de la corriente «Esperanza Popular» -crítica con el
presidente provincial de los populares alicantinos, José Císcar, y con la
alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo-, trata de extender su oposición interna a
la estructura del partido más allá de la capital alicantina. Para ello, el
pasado miércoles mantuvo un encuentro en Alcoy con varios exmilitantes del PP
identificados con el expresidente provincial Joaquín Ripoll”. Puedo
asegurar que ni soy impulsor de la “corriente” Esperanza Popular, ni trato de
extender ninguna oposición interna a la estructura del partido más allá de la
capital alicantina. Si el redactor de la noticia se hubiese tomado la molestia
de preguntarle a un servidor al que le atribuye alegremente intenciones
disparatadas podría haber hecho en su escrito honor a la verdad y no una loa a
la imaginación política.
Si lo hubiese hecho sabría que Santiago de Munck es un antiguo militante
del Partido Popular y antes de Alianza Popular y que es impulsor, no de una
corriente, sino de un Foro que se llama Esperanza Popular. El Foro Esperanza
Popular nació como un lugar de encuentro “virtual” en Internet para que los
“populares” que creen en la democracia interna y en la regeneración democrática
pudieran intercambiar ideas y propuestas, ante la ausencia de canales de
participación en el Partido Popular de la ciudad de Alicante. Ahora, el Foro
Esperanza Popular cuenta, además, con un espacio físico, con un lugar de
encuentro real en la
Plaza Gabriel Miró 14 de Alicante. Pero no es ninguna
corriente dentro del partido puesto que está abierto a la participación de los
vecinos de Alicante, sean o no afiliados del PP, y se está configurando como
una asociación para el estudio y debate de los problemas políticos, económicos
y sociales que afectan a los ciudadanos de Alicante.
Podría saber, si hubiese preguntado, que ni Santiago de Munck, ni los
compañeros que participan en el Foro Esperanza Popular, hacen una oposición
crítica ni a José Ciscar, ni a Sonia Castedo y, por supuesto, no tienen la
intención de extender una inexistente “oposición
interna a la estructura del partido” más allá de Alicante. Lo que hemos
hecho algunos y a título personal hasta ahora es manifestar nuestra
discrepancia sobre alguna decisión concreta adoptada por la Dirección Provincial
del PP alicantino o sobre alguna actitud de la primera edil de la ciudad de
Alicante. Criticar e impugnar, por ejemplo, por los cauces reglamentarios
internos la decisión adoptada de espaldas a los militantes de Alicante de
sustituir la Junta
local de Alicante por Juntas de Distrito, vulnerando los Estatutos del Partido,
es absolutamente legítimo y acataremos lo que resuelvan los órganos superiores
del partido y los tribunales de justicia en su caso. Pero no es, en modo
alguno, “realizar una oposición interna a
la estructura del partido”. Criticar comportamientos políticos poco
ejemplares como reuniones para “apuntalar”
las elecciones internas entre la Dirección Provincial
y concejales imputados es absolutamente legítimo y no constituye tampoco
expresión alguna de “una oposición
interna a la estructura del partido”. Como tampoco constituye expresión de “una oposición interna a la estructura del
partido” el hecho de que algunos manifestemos lo que es una obviedad que la
permanencia de imputados en los grupos populares municipales o autonómicos daña
a la imagen del Partido Popular. No existiendo ninguna corriente de oposición
interna a la estructura del partido, difícilmente se puede pretender
exportarla.
Parece que la actitud de algunos dirigentes expresada en el “conmigo o
contra mí”, en la máxima política imperante de acatar y obedecer sin rechistar,
se traslada con mucha facilidad a ciertos medios de comunicación. El pasado 13
de marzo, se celebró en Alcoy una reunión entre miembros del Foro Esperanza
Popular, miembros del Foro Movimientos de Bases del PPCV y antiguos militantes
del PP para intercambiar puntos de vista y para analizar la situación política
en nuestra Comunidad, y nada más. Querer convertir una simple reunión en una
especie de conspiración contra el aparato del PP es pura fantasía. El Foro
Esperanza Popular es lo que es y no lo que otros quieren que sea, ni lo que
algunos “venden” a los medios de comunicación, algunos de los cuales andan muy
ávidos de comprar cualquier mercancía aunque está completamente averiada.
Por último, parece imprescindible hacer una importante aclaración. Según
el Diario ABC el motivo para iniciar un expediente disciplinario contra un
servidor y el ex concejal Antonio Sobrino, con el fin de expulsarnos del PP,
estaría “en sus descalificaciones de las
decisiones que adoptan los órganos de dirección del partido o el menosprecio a
afiliados del PP (en este caso, la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo)”.
Pues bien, criticar e impugnar una decisión concreta (la supresión manu
militari de la Junta Local
de Alicante) no es una descalificación, como no lo es cualquier recurso que un
ciudadano interponga ante cualquier resolución administrativa o judicial. Y,
del mismo modo, manifestar que Sonia Castedo, a la que nunca hemos criticado en
su ámbito personal, debería dimitir o abandonar el Grupo Popular por estar
imputada por varios delitos tampoco es menospreciarla. Quien no quiera verlo
así es por puro interés. Quien quiera basarse en descalificaciones o
menosprecios inexistentes para continuar con sus pretensiones sancionadoras es
que sólo sabe ser fiel a íntimas convicciones totalitarias y antidemocráticas
que, por cierto, no deberían tener cabida en el Partido Popular.
Santiago de Munck Loyola